Eliminados de la Champions League y con su clasificación para la próxima edición de la Liga de Campeones asegurada, el Barcelona trabaja ya en la temporada 2024-2025.
A falta de que se produzca alguna salida importante que permita aliviar las arcas azulgranas (como las de De Jong o Araújo), la dirección deportiva culer ha empezado a contactar a futbolistas con los que les gustaría reforzarse, como es el caso de Dani Olmo.
Un caterano formado en La Masía del que tanto Deco como Laporta están enamorados y que en Can Barça se cree encajaría perfectamente en el próximo proyecto del club catalán.
Al parecer, el egarense estaría encantado de volver a casa. Sin embargo, los problemas económicos del Barça y el contrato que le liga al Red Bull Leipzig hasta 2027, parecen dos escollos importantes.
La única forma de sacarlo este verano sería que el Barcelona lograra reunir a base de ventas los 60 millones de euros que indica su cláusula y lograr una nueva palanca que permita inscribirlo, tras las renovaciones de Cubarsí, Lamine Yamal y Fermín.
De hecho, todo hace indicar que, si se produce algún fichaje importante este verano, será el de Dani Olmo. En ningún caso llegarán futbolistas que impliquen un gasto que comprometa las arcas del club. Así que, Olmo y cantera… o solo cantera. Ese es el dilema azulgrana de cara a este verano.