En las últimas fechas se viene hablando largo y tendido del divorcio sufrido entre Joan Laporta y Xavi Hernández y del que cada vez más dudan pueda llegar a reconducirse; máxime tras las últimas negativas del presidente azulgrana para reunirse con el de Terrassa antes de que concluya la presente temporada.
Un problema más para el equipo catalán, teniendo en cuenta los problemas económicos de los culers, ya que, a diferencia de lo que hubiera sucedido en el caso de aceptarse su salida hace ahora apenas un mes, para deshacerse de Xavi y todo su equipo se tendría que hacer frente a una indemnización millonaria.
Concretamente de 15 millones de euros, lo que unido al bajo salario del actual técnico de la primera plantilla, no solo mermaría las opciones de fichar del club blaugrana, sino que apenas serviría para quitarse masa salarial; otro de los problemas del Barcelona para poder reforzarse durante este verano.
Es por eso por lo que, en el caso de que no haya manera de reconducir la confianza perdida en el ex capitán del Barça, la única solución pasaría por colocar Rafa Márquez, el técnico del filial, al frente de la primera plantilla.
Parece que todo se decidirá en la reunión que técnico y presidente tendrán al día siguiente de que se baje el telón a la temporada 2023-2024. En una semana saldremos, pues, de dudas.